<span data-metadata=""><span data-buffer="">El Dr. Cerebro rapado
Guatemalteco afincado en Mallorca, por el cerebro y por el tinto de verano.
No tiene un Cerebro Injodible®, pero lo intenta cada día con lo que sabe de él. Como neurocirujano, lo que sí sabe hacer es operar el cerebro. El tipo lleva más de 3000 cirugías.
Está aquí para divulgar neurociencia en el día a día y por la fama. Y no precisamente en ese orden.
Ignacio Berges
El Steve Jobs (de su pueblo)
Maño de pueblo dando tumbos por Países Bajos para mejorar su inglés, pero poco.
Soñaba con ser Steve Jobs. Tras montar y desmontar algunas empresas y unos tortazos de realidad, emprende y diseña para ser libre. Sabe que el camino es el del Cerebro Injodible®.
Está aquí para crear un negocio muy guapo y por la pasta. Cerebro y dinero es un cóctel que le gusta bastante.
<span data-metadata=""><span data-buffer="">Las ideas que hoy forman los principios neurocientíficos de Cerebro Injodible® surgieron del cerebro de Osman.
El tipo se crió en El Paraíso II de Guatemala, un barrio que, por decirlo fino, de paraíso tiene poco. Si te cuento que su interés por el cerebro viene porque cuando era niño vio uno en pedazos sobre las calles de aquel barrio, te lo digo todo.
Para salir de ahí, no le quedó más que recurrir al único recurso que manejaba: su cerebro.
Con él se propuso adquirir el mayor conocimiento posible. Cerebro Injodible® existe hoy porque alguien tuvo la osadía y la locura de pretender saberlo todo. Identificó que la única forma de hacerlo era sabiendo cómo funcionaba su cerebro, y a eso ha dedicado su vida.
A finales de 2021 Osman vino a mi podcast y lo exprimí al máximo en aquella entrevista.
Recuerdo que ese episodio fue de los más escuchados y despertó un gran interés.
Mi mente de negocios ya empezaba a ver que ahí había algo.
Hubo conexión entre nosotros y seguimos manteniendo el contacto hasta que, a los pocos meses, Osman me pidió que nos reuniésemos para contarme algo.
Yo estaba pensando lo mismo que él: quería que montásemos algo juntos. Verás, muchas personas que están en el mundo de la ciencia suelen tener dificultades para explicar esos conocimientos y llevarlos a la práctica del día a día.
No les pasa a todos, pero si has tenido alguna vez delante un artículo científico sabrás que está en un idioma que, a muchos, se nos escapa.
Sin embargo ese conocimiento es valiosísimo y es una pena que se quede ahí.
Así que, precisamente por eso es por lo que decidimos juntarnos.
Un guatemalteco que sabe mucho de neurociencia (demasiado para su propio bien diría yo), pero le cuesta, a veces, bajarlo a tierra y un maño, que se ha metido en el barro de los negocios hasta las orejas y sabe poner las cosas accesibles y atractivas.
Parece el principio de un chiste, pero ojo, porque vamos bastante en serio con esto.
De todos modos, igual te hemos hecho gracia así que si te interesan alguno de nuestros servicios, puedes apuntarte a la lista de espera aquí:
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¡Hecho! OJO, para tu cerebro no es spam pero para tu correo igual sí. Revisa y si eso sácalo.